Quizás no sea el peor, pero no es un buen compañero con quien compartir cama. Lejos de procurar un sueño placentero, hacerle entrar en nuestra cama no nos aportará beneficios sino todo lo contrario. Hablamos de nuestros smartphones.

Se han convertido en una extensión de nuestra mano y nos acompañan a todos lados. Por supuesto entran en el baño sin ningún pudor y de milagro se salvan de la ducha. Y cuando llega la hora de dormir… allí están. Han sobrepasado la puerta de nuestra habitación y los dejamos en la mesilla, bien cerca, hasta incluso bajo la almohada. Apagamos la luz tras apagarlos y hay quien apaga la luz antes de apagar la pantalla, resistiéndose a dejarlos descansar y al propio descanso.

Como siempre es mejor hablar de beneficios que de problemas, aquí os dejo algunos para que valoreis la conveniencia de seguir manteniéndolos cerca, o desterrarlos de vuestra habitación y cama cuando se duerme. Estos son los beneficios:

  • Se concilia antes el sueño, y esto es muy notorio en quienes dan vueltas antes de dormir.
  • El sueño es más profundo, evitamos los microdespertares que nos ocasiona la vibración, las notificaciones, que nos hacen estar en un estado de hipersensibilidad sensorial.
  • Evitamos un posible riesgo de incendio. Se han registrado algunos casos de sobrecalentamiento sobre todo entre quienes acostumbran a mantenerlo bajo la almohada, o sobre la cama y a su vez cargándose.
  • El sueño es de mayor calidad, sobre todo si evitamos el uso de pantallas entre 1-2 horas antes de dormir, ya que la luz que desprenden suprime la secreción de la melatonina interna, que es la hormona que da la señal al cuerpo para entrar en fase de sueño, procurando además un sueño de calidad.

Podría seguir, pero ya se sabe, lo bueno si breve…

Si te interesa cambiar hábitos para mejorar tu sueño no dudes en contactarnos

No es un buen compañero de cama …
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